jueves, 23 de septiembre de 2010

Perú disminuirá vulnerabilidad a desastres naturales, mejorará su capacidad de respuesta con ayuda del BID


Préstamo de US$25 millones apoyará reformas legales e institucionales para optimizar la previsión, reducción y manejo de factores de riesgo

 

Perú, el país latinoamericano más castigado por los desastres naturales, reducirá su vulnerabilidad y mejorará su capacidad de respuesta a las emergencias con un préstamo de US$25 millones del Banco Interamericano de Desarrollo.

 

El programa es el primero de tres préstamos programáticos de apoyo a reformas de política para ayudar al gobierno a implementar medidas destinadas a la previsión, reducción y control de los factores de riesgo de desastre en la sociedad y a lograr una adecuada respuesta ante emergencias.

 

Entre 1970 y 2009, un total de 105 sequías, inundaciones, deslaves, heladas, sismos y erupciones volcánicas causaron 74.000 muertes y afectaron a 18 millones de personas, más que en ningún otro país de la región. Asimismo, en los ciclos 1982-83 y 1997-98 el fenómeno de El Niño arrojó pérdidas por US$6.800 millones, en tanto que el terremoto de Pisco en 2007 provocó daños superiores a los US$2.000 millones.

 

Este año, inundaciones y deslizamientos causados por lluvias en Cusco, Ayacucho, Puno, Huancavelica y Huánuco dejaron un saldo de 92 muertos y 235.000 afectados, 27.000 viviendas dañadas o destruidas, y 11.700 hectáreas de cultivos arruinadas.

 

Mediante su apoyo al proyecto de Ley Marco para la Gestión Integral de Riesgos de Desastres que pondrá a Perú a la vanguardia de la legislación sobre el tema, el programa fortalecerá el marco normativo e institucional para el manejo del riesgo en las áreas de identificación, reducción, manejo, y gestión financiera de desastres.

 

IDENTIFICACIÓN: Sistemas modernos y eficientes de información facilitarán la prevención y alerta temprana mediante la adopción de estándares y de una plataforma integrada de datos y el establecimiento de sistemas de monitoreo y análisis de fenómenos naturales y cambio climático.

 

REDUCCIÓN DE RIESGOS: Se promoverá el uso seguro del territorio, el ordenamiento territorial  y mayor coordinación entre diferentes niveles de gobierno, difundiendo normas de seguridad en asentamientos precarios, poblaciones en zonas de riesgo y el sector agropecuario, con especial cuidado en la reducción del riesgo ante  inundaciones.

 

MANEJO DE DESASTRES: Se apoyará la formulación de planes de emergencia ante sismos y tsunamis, sobre todo para Lima y Callao, incluyendo simulacros, elaboración de guías y respaldo a los Centros de Operaciones de Emergencia Regionales.

 

GESTIÓN FINANCIERA: Se establecerá una Estrategia Nacional de Gestión Financiera de Riesgos de Desastres que incluya fondos de reserva para emergencias, líneas de crédito contingente, instrumentos de transferencia de riesgos, incluidos los seguros para la infraestructura pública.

 

El préstamo es a 20 años de plazo, con un período de gracia de cinco años, y a una tasa de interés variable basada en la Libor.

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